Samuel Viejo

Viejo, ¿qué harías si me sacara el melate? El viejo le contesta: - Te quitaría la mitad y te dejaría, definitivamente... Y ella le dice: -

En cambio, el profeta Samuel, viejo ya, al fin de su carrera de jefe y juez, dio cuenta de su gestión y mostró que nunca había sido ambicioso (1 Sam 12, 3-5).

Pues nada, D. Samuel, viejo bribón, cuando miro al cielo aún se me antoja verte paseando entre las nubes, bien amarradito de la mano de tu mujer.

Hola Samuel, viejo cascarrabias y tacaño, ¿Qué ha quedado de aquel niño que daba sus estrenas a una pobre mujer? Nada; Y por eso.....para recordarte la verdad del viejo ...

-¡Samuel, viejo zorro del espacio! –Marta se volvió sonriendo a la beatifica y cincuentona cara del primer oficial de Jorge, y le abrazó cariñosamente.